La terapia visual es un programa personalizado de ejercicios y actividades diseñados para mejorar y fortalecer el sistema visual.

Se utiliza principalmente para tratar problemas de visión binocular, acomodación, enfoque, coordinación ojo-mano y otras dificultades visuales.

Durante la terapia visual, el optometrista trabaja en colaboración con el paciente para corregir deficiencias visuales y mejorar las habilidades visuales necesarias para el desempeño óptimo en las tareas diarias.

La terapia visual puede incluir actividades de seguimiento visual, enfoque, percepción espacial y coordinación ojo-mano.